EL TELETRABAJO COMO UNA NUEVA FORMA DE RELACIÓN LABORAL EN EL ECUADOR

Abstract

El inicio del estudio parte en la necesidad de determinar la situación del teletrabajo en el Ecuador, que tomo su mayor repunte a partir de la pandemia del Covid – 19, tomando desprevenidos a los ecuatorianos en sus sistemas de comunicación, además en la capacidad para enviar y recibir información (Pérez, 2020). Pero eso no lo es todo, porque el incremento del tráfico en la red entre los empleados y las empresas, deja un punto sin considerar como lo es el resguardo seguro de la información confidencial, así como el almacenamiento de datos, contraseñas de acceso y otras entradas expuestas a los ciberataques. De ahí que se realizará un análisis de los métodos de telecomunicación que se han utilizado, con el fin de establecer las dificultades que han tenido los trabajadores en el cumplimiento de los objetivos empresariales, considerando además la normativa jurídica expedida hasta el momento. El trabajo a distancia o comúnmente llamado teletrabajo, se lo considera así porque no se lo desarrolla dentro de la misma oficina o lugar de la empresa contratadora, sino que se ejecuta fuera del lugar habitual con los equipos tecnológicos necesarios y el servicio de internet, es decir, con todo el apoyo de la Tecnología de Información y Comunicación (TIC) (Joric, 2020). Mediante esta metodología, el empleado realiza sus actividades sin necesidad de salir de su casa, considerando que de ninguna manera perderá sus derechos laborales adquiridos, con toda la igualdad de condiciones que los empleados que asisten presencialmente a laborar. Debido al entorno laboral y económico existente en el Ecuador y en el mundo por la pandemia del COVID 19, el teletrabajo es hoy en día una práctica laboral que se ha elegido como una manera preventiva para el cuidado de la vida del empleado (OIT, 2020), mismos que a pesar de que desempeñan su labor desde su propio hogar, no están exentos del cumplimento de los objetivos de la empresa, aportando a la rentabilidad, lo que ha permitido conservar su empleo y con ello, reducir la incidencia del desempleo (López, 2020).